Con la reflexividad y belleza de todos sus textos filosóficos, Paul B. Preciado firma una ópera prima que toma forma de correspondencia fílmica, una carta dirigida a Virgina Woolf repleta de experiencias que sindican en un trascender tan personal como colectivo, que después de su paso por festivales y cines llega a Filmin este 9 de febrero. “Quería escribirte para decirte que soy uno de tus Orlandos. Estoy vive, he salido de tu ficción. No te haces a la idea, el mundo de hoy está lleno de Orlandos. Estamos cambiando el curso de la historia”, le cuenta Preciado a Woolf.
Mediante una serie de encuentros y desencuentros con la imagen, el autor de Manifiesto contrasexual (2002) labra una ficción política que clama una reconfiguración de las normas sociales, aposentadas en el heteropatriarcado, que han determinado definiciones hegemónicas sobre cuáles son los cuerpos soberanos y que como ya defendía entonces han establecido un orden simbólico sobre qué cuerpos tienen acceso a ciertas formas de gobierno y qué cuerpos son excluidos de ese contrato social.
Remitiendo al hilo narrativo de la novela Orlando: una biografía (1928), de Virginia Woolf, donde se nombra, tal vez, al primer personaje trans de la literatura occidental, para tejer un diario de viaje a través de la historia ahondando en la intimidad de los cuerpos no binarios. Gracias a la yuxtaposición de su relato personal con el de otras veintiséis personas trans, establece un estado de mundologías que se reúnen en torno al necesario anhelo de superar un binomio de género impuesto. Brindando un documento fílmico que sirve a estas identidades oprimidas un encuentro con su propia genealogía negada.
Una crónica autobiográfica que recuerda que “la contrasexualidad no habla de un mundo por venir; al contrario, lee las huellas de aquello que ya es el fin del cuerpo, tal como este ha sido definido por la modernidad”. Revelando, mediante la mirada audaz sobre el texto de Virginia Woolf, una suerte de sublevación contra el régimen epistemológico y político que casi cien años después sigue encerrando los cuerpos en un constructo de la historia o en otro. Reconstruyendo las etapas de su propia transformación personal a partir de imágenes, voces testimoniales, escritos y teorías que sirven para reflexionar sobre los modos de subjetivación e identidad que han conformado la construcción social y política del sexo. Celebrando a cada Orlando que le acompaña en este documental.
Un ensayo poético que cuestiona las mismas normas del género cinematográfico regala un nuevo futuro posible al Manifiesto contrasexual y reviste los textos filosóficos de Preciado de un nuevo régimen. Con un final sentenciado por Virginie Despentes en su cameo como jueza, donde dictamina la experiencia queer como una práctica libertaria a transitar, reescribir y conquistar en términos políticos.
Orlando_3.jpg
Orlando_4.jpg
Orlando_5.jpg
Orlando_6.jpg
Orlando_7.jpg