“Para mí el arte es todo aquello en lo que hay verdad. (…) Para mí significa liberación”, nos dice Mabel Esteban en esta entrevista. La artista burgalesa nos comparte su visión sobre el arte como medio de expresión genuina, donde la confianza y la paciencia son fundamentales. Con un estilo pop e ilustraciones planas, Mabel ha marcado su trayectoria con una expresividad única en la que las mujeres son las protagonistas, desde proyectos propios como sus dos cómics, talleres de cerámica o calendarios hasta ilustraciones para portadas de discos, merchandising y festivales.
Has comentado, en otras ocasiones, que eres de papel y lápiz, que desde pequeña siempre te ha encantado dibujar, ¿en qué momento decidiste dedicarte al arte y hacerlo tu profesión?
No hubo un momento, fue una direccionalidad más progresiva y natural. Realmente no he sabido a qué dedicarme hasta hace poco tiempo.
Te defines como ilustradora, ¿pero qué hueco ocupan la pintura y la cerámica en tu obra?
Suelo decir que soy ilustradora porque es mi ocupación principal y una de las que más disfruto, pero a veces me apetece expresarme por otras vías. Me encanta hacerlas todas, cada una tiene un registro diferente por lo que lo que expresas adquiere otras connotaciones y eso es muy guay.
Entonces, ¿cómo definirías el arte? ¿Qué significa para ti?
Para mí el arte es todo aquello en lo que hay verdad. Aquellas manifestaciones en las que se encuentra la intención de expresión y lectura sobre una realidad, sea cual sea, aunque a veces no sea demasiado evidente. Para mí significa liberación.
¿Qué significa Burgos para ti?
Muchas cosas. Burgos es mi cuna y mi casa, donde vive gran parte de mi familia y mis amigas. Burgos es adverso y acogedor a la vez, tanto si hablamos de clima como de su gente. Burgos representa una Castilla un tanto rancia y una Castilla llena de arte y sensibilidad. Es una ciudad tranquila que me deja vivir entre árboles y en la que puedo ir caminando o en bici a todas partes.
Mabel_Esteban_6.jpg
Si nos adentramos en el mundo del arte, podríamos decir que es complicado vivir de ello, que es todo un reto. Es un sector precario para la gran mayoría. ¿Cómo lo haces tú, cómo lo llevas? ¿Cuál crees que fue el momento en el que tu trabajo empezó a verse recompensado?
Yo sigo planteándome si puedo vivir de ello, aunque la experiencia me dice que sí. No puedo decir que me dedique cien por cien al arte porque cuando haces un trabajo muy personalizado para una imagen de marca, por ejemplo, para mí no lo es. Yo me gano la vida combinando encargos con arte, puedo decir orgullosa que me complace mucho hacer las dos, en otro caso me volvería loca.
Por un lado, está mi verdad expresada a través del dibujo (o a través de lo que sea), y por otro, una imagen que he hecho para un cliente. Ambas están hechas bajo la misma técnica, pero el significado es muy distinto. Hubo un momento en el que parecía que no iba a poder vivir de la ilustración, tras la pandemia justo cuando me hice autónoma, y cuando iba a tomar la decisión de tomar otro rumbo me llamó el cliente más grande que he tenido y desde entonces no he parado de trabajar porque creo más en lo que hago. A veces lo más importante es tener confianza en que puedes hacerlo, ser paciente.
Cuando te pones a dibujar, ¿tienes ya unas ideas fijas que quieres plasmar o realizas bocetos para definir lo que vas a crear?
Normalmente sí, antes de dibujar me pregunto qué es lo que voy a expresar y me lo imagino un poco, luego aboceto y después viene el arte final. Mi inspiración esta asociada a aquello que quiero contar, luego busco referencias que puedan estar relacionadas con el mensaje.
Durante un proceso de creación, muchxs necesitamos música, un café o mascar chicle, ¿tú también tienes una manía a la hora de crear?
Si tengo que pensar, necesito silencio. A veces, cuando no tengo la idea muy clara, me voy a dar un paseo, a nadar o a andar en bici para oxigenar el tránsito de pensamientos. Cuando ya tengo configurada la idea y solo es colorear, puedo escuchar música, un podcast o similar.
A veces se habla de la creación como un objeto de consumo, no como una expresión artística, única y personal. Aquello que no se consume se rechaza. En este escenario, ¿piensas que la esencia propia ha sido desplazada por la homogeneización del arte? ¿Piensas que las redes sociales son la gran causa de este arte más homogéneo?
Inevitablemente sí. A la vez, creo que al haber más tránsito de ideas se pueden generar nuevas ideas más rápido. Todo tienes sus pros y contras. Igual la globalización y la homogenización del arte acaban con la idea individualizada y endiosada de artista y a la vez así acaba con su ego, que nos hace tan arrogantes y poco escuchadores en ocasiones.
Mabel_Esteban_8.jpg
Y ahora ha llegado la IA, ¿qué impacto crees que tendrá en la ilustración? Y en tu obra, ¿piensas que está teniendo un impacto? 
La verdad es que no lo sabemos del todo bien. Creo que la IA tiene que ser sometida a muchas regularizaciones porque son avances tecnológicos con mucho poder y pueden ser muy peligrosas, ya que pueden vulnerar los derechos de autor y de imagen personal, pero también son herramientas que nos pueden ayudar a trabajar. Es un mundo aun por descubrir.
Después de este pequeño debate, si te pregunto por tus referentes, ¿cuáles dirías?
Referentes muchos, sobre todo mujeres, pero con las redes sociales tengo más de los que te pueda enumerar. No soy muy de elegir favoritos.
Hemos visto en tus ilustraciones que, en la gran mayoría de ellas, las mujeres son las protagonistas, ¿son ellas, en especial, tu gran referente?
Hago mujeres porque hay algo de autorretrato en mis dibujos, en esencia hablo de mí misma, no es que sea yo a la que dibujo.
Sacaste una reedición de tu cómic La muda, ¿te gustaría ilustrar más historias? ¿Tienes alguno en proceso?
Saqué un cómic pequeño hace poco, se llama Algunas criaturas de agua, y me gustaría sacar alguno más, más extenso. Pero un cómic es un proceso largo y arduo y tienes que tener las ideas bien organizadas.
Siguiendo con tu obra, Las chuches busca sorprender y crear esta incomodidad de ver rostros dulces contrapuestos a una expresión y emoción perturbadora, ¿dirías que esta dualidad define tu estilo?
Sí, siempre me ha hecho gracia esa contraposición de lo infantil con lo oculto y más siniestro.
Vemos que las gominolas tienen un gran protagonismo ¿qué mensaje refuerzan?
Lo infantil, lo inocente.
Mabel_Esteban_5.jpg
Esta crítica a lo establecido, a lo considerado bueno y malo, ¿proviene de una experiencia personal? ¿Alguna vez te has sentido fuera de lugar, como aquello extraño o ajeno?
Por supuesto, el bicho raro. Puedo decir que cada vez menos pero sí, siempre hay un poco de ello en mis ilustraciones.
¿Qué le dirías a la gente que se quiere dedicar a la ilustración o está empezando?
Que se mejora a base de experiencia y que tengan paciencia.
Si tuvieras que decir qué parte de la ilustración te gusta menos o te cuesta más, ¿cuál sería? ¿Y con la que más disfrutas?
La peor parte es tener que ser autónoma, y la que más disfruto es cuando puedo sacar un proyecto personal adelante.
¿Tienes una colaboración soñada?
La verdad es que no, pero sé que hay muchísimas que me encartaría hacer.
¿Estás creando ya tu próxima obra?
La estoy pensando.
Por último, ¿cuál es tu sueño por cumplir?
Vivir más alejada del estrés.
Mabel_Esteban_7.jpg
Mabel_Esteban_3.jpg
Mabel_Esteban_12 2.jpg
Mabel_Esteban_10.jpg
Mabel_Esteban_11 2.jpg
Mabel_Esteban_13.jpg
Mabel_Esteban_1.jpg
Mabel_Esteban_2.jpg